El Consejo Español de Drogodependencias y otras Adicciones (CEDOA), se encargó un trabajo sobre la definición de estos indicadores, los cuales fueron validados en la reunión plenaria del 24 de mayo de 2023.
Un punto relevante es el abordaje del juego como práctica, donde se subraya que no siempre conduce a un problema. Sin embargo, factores como la frecuencia, la intensidad y las características individuales pueden llevar a algunas personas a desarrollar un problema de juego. El informe destaca la proporción de personas adultas con posible juego problemático o trastorno por juego, basándose en criterios del DSM-V.
Respecto al trastorno de juego diagnosticado, no excede de 8000 personas en España según la Memoria del Plan Nacional contra las adicciones del Ministerio de Sanidad sobre personas en tratamiento por trastornos de juego.
Esto equivale al 0,02 de la población entre 18 y 75 años y el 3,6% total de personas en tratamiento por drogadicciones, muy alejadas de las cifras señaladas por el Ministerio de Consumo, sin señalar método y fuente de donde se extraen sus conclusiones.
La Doctora Roncero del Gregorio Marañón advierte que se está tratando algunas adicciones entre las que destacan inversores en bolsa, apuestas deportivas, criptomonedas así como a las compras o pornografía “donde el objetivo no es que cada persona suelte su discurso, sino que aprendan técnicas para reducir el uso de determinadas conductas perjudiciales para esa persona”.
La conclusión también es que la pandemia del Covid produjo un aumento de alguno de estos comportamientos problemáticos relacionado con internet.
Está documentado que esa mención con un uso problemático de internet fuera una serie de estilos de vida poco saludables y trastornos médicos que se cree que representan las consecuencias de formas graves de este uso problemático de la red.
Según el informe sobre Adicciones del Ministerio de Sanidad en España el 21,5% los estudiantes de entre 14 y 18 años ha jugado con dinero “online” en los últimos 12 meses.
La conclusión es que jugar a los videojuegos en sí no es un problema, la mayoría de los niños, adolescentes y adultos jóvenes lo hacen, siendo solo una parte de su vida cotidiana, una vida totalmente integrada y saludable. Por el contrario, «si se utilizan los videojuegos para escapar de los problemas cotidianos, para mejorar el estado de ánimo o para afrontar las circunstancias negativas de la vida, sobrellevar la ansiedad o la depresión, estaríamos hablando de escapismo y de adicción, especialmente si la única solución a todo eso es sentarme al ordenador y jugar«.
El reconocimiento de que el Bingo presencial es el juego de azar que genera menos patologías que reconoce la propia FEJAR (Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados), es debido sobre todo al carácter social y familiar del juego.