El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) es un elemento clave en la regulación laboral en España, ya que establece la cuantía mínima que un trabajador puede percibir. Su actualización anual impacta directamente en diversos sectores, incluidos aquellos que dependen de este indicador como referencia salarial.
En 2025, el SMI ha experimentado un incremento del 4,41%, elevando el salario mínimo mensual de 1.134 € a 1.184 € en 14 pagas, con efectos retroactivos desde el 1 de enero. Este ajuste tiene implicaciones significativas para el sector del empleo doméstico, en el que se encuentran las empleadas del hogar, cuyos sueldos y cotizaciones se ven directamente afectados por la nueva normativa.
Empresas especializadas como Noviser, que ofrece servicios de tramitación y gestión laboral para este colectivo, juegan un papel fundamental en la adaptación a estos cambios normativos.
Impacto de la subida del SMI en el salario de las empleadas del hogar
El aumento del Salario Mínimo Interprofesional en 2025 ha supuesto un ajuste en la tabla salarial de las empleadas del hogar, que ahora deben percibir un mínimo de 1.184 € al mes en 14 pagas o 1.381,34 € mensuales en 12 pagas si las pagas extraordinarias están prorrateadas. Además, para aquellas que trabajan por horas, el nuevo importe mínimo por hora se sitúa en 9,26 €, lo que supone un incremento respecto al año anterior.
La modificación del SMI también repercute en las bases de cotización de la Seguridad Social, que han sido actualizadas para adecuarse al nuevo salario. Dependiendo de la jornada laboral, los tramos de cotización varían, lo que implica ajustes en los costes tanto para empleadores como para trabajadoras. En este sentido, la Orden PJC/178/2025 establece nuevas retribuciones mensuales y las bases de cotización específicas, que van desde 296 € hasta 1.381,20 €, aplicando diferentes porcentajes en función del tramo salarial.
En este contexto, es fundamental que los contratos y nóminas sean revisados y actualizados conforme a la normativa vigente, teniendo en cuenta que la nueva regulación también afecta a las retenciones del IRPF, lo que podría suponer una reducción en el salario neto percibido por algunas trabajadoras.
Obligaciones para los empleadores y gestión administrativa
Con la entrada en vigor del nuevo SMI, los empleadores deben asegurarse de cumplir con las nuevas condiciones salariales y de cotización para evitar posibles sanciones. Entre sus responsabilidades se encuentra la actualización del contrato de trabajo, el alta en la Seguridad Social y la correcta aplicación de las retenciones fiscales correspondientes.
En este proceso, entidades como Noviser facilitan la gestión administrativa de los contratos de empleadas del hogar, ofreciendo asesoramiento en la tramitación de altas, elaboración de nóminas y cumplimiento de la normativa laboral. Ante la complejidad de los cambios, contar con un servicio especializado permite garantizar el cumplimiento legal y asegurar que tanto empleadores como trabajadoras se adapten correctamente a las nuevas condiciones establecidas en 2025.