Las hidrolimpiadoras son equipos de limpieza que permiten agilizar las labores de mantenimiento de artefactos y zonas que usualmente se exponen a gran cantidad de suciedad, mediante un consumo eficiente de agua, ya que gracias a la presión con la cual es expulsado este vital líquido, se pueden limpiar superficies con suciedad adherida en un corto periodo de tiempo.
A éstas se les pueden dar diversos usos, que van desde tareas cotidianas de limpieza en el hogar, hasta labores pesadas relacionadas al cuidado y mantenimiento de los distintos componentes de las edificaciones. De manera que si en su hogar dispone de jardín o es un profesional, una hidrolimpiadora es una de las herramientas de jardínería e industriales que no nunca puede faltar en el hogar o taller.
Sin embargo, no todos los modelos de hidrolimpiadoras se podrán adaptar a cualquier tipo de exigencias, pues éstas se clasifican de acuerdo al uso que se le desee proporcionar.
Una de las aplicaciones frecuentes que se le dan a las hidrolimpiadoras es para el cuidado y mantenimiento de los vehículos en el hogar, para lo cual no se requiere de un equipo con características profesionales, sino que una hidrolimpiadora doméstica podría funcionar adecuadamente. Sin embargo, cuando se trata de requerimientos que implican el uso del equipo durante largos periodos de tiempo y a diario, será indispensable contar con una hidrolimpiadora profesional que sea capaz de solventar las necesidades particulares en cada situación.
Entre los aspectos primordiales que se deben tomar en consideración a la hora de seleccionar una hidrolimpiadora se encuentran principalmente la potencia y presión que ofrece el equipo; pero además será necesario tener en cuenta otros factores que pueden ser indispensables para cumplir con las expectativas del cliente.
Presión del aguaAntes de comprar una hidrolimpiadora, es necesario verificar que la presión que ofrece el motor sea suficiente para las tareas de limpieza que se desean realizar. En este sentido, dicha presión se mide en «bares», cuya unidad es equivalente a un kilogramo de presión por cada centímetro cuadrado.
A manera de referencia, se puede estimar que para uso doméstico ocasional se podría elegir un equipo que ofrezca una potencia comprendida entre 100 y 110 bares; para limpieza de vehículos o pequeñas zonas e exterior cuya limpieza se realiza periódicamente, una hidrolimpiadora de 120 bares puede ser la ideal.
Pero usando se trata de trabajos de limpieza intensivos, que incluyen la remoción de suciedad de amplias zonas de exterior mayores a 50m² y cuyas superficies están expuestas constantemente a las inclemencias climáticas, se deben elegir equipos cuya presión esté comprendida entre 140 y 180 bares.
PotenciaDel mismo modo, se debe considerar que la hidrolimpiadora debe ser más potente si requiere trabajos de limpieza más profundos. Por tanto, cuando se le pretende dar un uso simple como limpieza de bicicletas, alfombras o mobiliario de exterior, es posible que con un equipo de 1.500 W o 1.600 W sea suficiente. Sin embargo, para trabajos pesados, es mejor buscar modelos que superen los 2.000 W a 2.500 W.
Frecuencia de usoLa regularidad con la cual se deba usar la hidrolimpiadora es fundamental para poder elegir un modelo adecuado. En este sentido, se debe considerar si el uso que la misma tendrá va a ser eventual o constante. Usualmente para tareas del hogar es suficiente con un equipo doméstico que ofrece un rendimiento de uso continuo comprendido entre 10 minutos a 1 hora.
Pero cuando se trata de hidrolimpiadoras para negocios, dónde el equipo se deba usar por más de una hora de forma constante, será indispensable elegir un modelo profesional.
Caudal necesarioLa amplitud del caudal determinará qué tan rápido se puede cubrir toda la superficie a limpiar. Es por ello que si se desea agilizar el tiempo de labores, se podría tomar en consideración un modelo que ofrezca un caudal más amplio.
Posibilidad de uso con agua calienteCiertos tipos de suciedad son muy difíciles de retirar, aunque son susceptibles a la limpieza por medio de agua caliente. Algunos modelos de hidrolimpiadoras ofrecen la posibilidad de funcionar por medio de agua caliente, llegando a soportar temperaturas de hasta 60°C.
Este factor es fundamental en caso de que se requiera retirar constantemente suciedad a través de agua caliente, por lo que es una variable importante según los requerimientos de cada usuario.
Sistema de activaciónEn algunos casos es posible que se requiera usar la hidrolimpiadora en zonas donde no hay acceso a una toma de electricidad convencional, por lo que los modelos a batería pueden ser una elección ideal y funcional. Sin embargo se debe tomar en consideración que este sistema de activación mediante baterías suele ser menos potente, por lo que en caso de que se requiera un mayor rendimiento se deberá disponer de una hidrolimpiadora eléctrica y el uso de un generador o toma de corriente.
Longitud de la mangueraLa posibilidad de extensión de varios metros de manguera en una hidrolimpiadora mejora la experiencia de uso, ya que permite una mayor movilidad. Es por ello que los modelos que ofrecen está opción suelen ser bastante populares.
Al mismo tiempo, se puede validar que la hidrolimpiadora incluya un sistema de auto-retracción de la manguera, para facilitar la recogida del equipo una vez se culmine con las labores de limpieza.
Tipo de motorMuchos modelos de hidrolimpiadoras domésticas funcionan mediante un motor eléctrico que cumple con los requerimientos básicos para las tareas habituales del hogar. Sin embargo, la mayoría de equipos profesionales poseen un motor de combustión que funciona mediante gasolina, el cual ofrece una mayor autonomía.
Esto implica un elemento adicional para poner en funcionamiento la hidrolimpiadora (combustible). Es por ello que es importante valorar el uso que se le va a dar al equipo y validar que el tipo de motor que incluya se adapte a los requerimientos de uso solicitados.
AccesoriosContar con una variedad de boquillas y elementos que contribuyan a realizar diversas actividades también puede ser un factor decisivo para tomar una decisión de compra acertada. De este modo será posible sacarle el máximo provecho al equipo cuando se adquiere para realizar labores del hogar.