La demanda en el mercado de purificadores de aire ha subido drásticamente en el último año a causa de la pandemia. Ante ello, los fabricantes han respondido no solo en cantidad, aumentando la producción, sino también en calidad y con nuevas tecnologías.
Uno de ellos que produce purificadores con extrema efectividad en eliminar gérmenes de todo tipo es la compañía española Desair. Como se está expandiendo por todo el mundo, se ha preguntado al director general de la empresa, Anton Konstantinov, acerca de su producto.
¿Cómo se ha generado la idea de negocio de los purificadores de aire?
Buenos días. No sería exacto decir que nos ha surgido esta idea de negocio porque tenemos 25 años de experiencia en la fabricación de equipos de desinfección de aire con tecnología UV-C. Pero, hasta este momento, los producíamos en Rusia. Este producto tiene allí mucha demanda y éxito, incluso los purificadores están instalados en los despachos del Kremlin. Con los problemas del COVID-19, pensamos que sería genial lanzar este producto en España y en el resto del mundo. Así, podríamos ayudar a la gente a reducir los contagios en los espacios cerrados que, desde el principio de la pandemia, era una de las principales metas en el mundo. Sin embargo, la capacidad de la fábrica de Rusia no era suficiente para poder vender al exterior. Por eso, hemos empezado a fabricar en España un modelo nuevo mucho más potente, que estaba en pruebas desde hace, más o menos, 3 años. Todo el material es de origen español y homologado para todo el mundo.
¿Cómo habéis podido mejorar el producto? ¿Habéis utilizado nueva tecnología?
No del todo. Para multiplicar la efectividad de la tecnología UV-C, hemos cambiado el material con el que estaban hechos los anteriores dispositivos por aluminio. Este material, además de tener características propias que eliminan los gérmenes, tiene mucho reflejo, gracias al cual el nuevo modelo se convierte en una máquina ideal para matar los patógenos. Así, hemos alcanzado cifras de efectividad que ni nosotros mismos podíamos creer: se consigue eliminar el 99,99 % de los gérmenes, entre los cuales están bacterias, hongos y virus, y lo que es más importante para nosotros es que es efectivo contra el COVID-19.
¿Podéis demostrar esas cifras tan elevadas?
No somos nosotros quienes hemos demostrado unas cifras tan elevadas que han sorprendido a los mismos científicos de los laboratorios a los que nos dirigimos para confirmar la efectividad del nuevo equipo. Para nosotros, era un hecho esperado. Sí, las cifras están confirmadas y tenemos todos los certificados necesarios. La verdad es que tenemos otra gran sorpresa, ya que nuestros dispositivos eliminan también la “superbacteria” de la que ahora los científicos hablan mucho y que, más adelante, puede ser una nueva amenaza para el mundo.
Debido a estas cifras, ¿tenéis mucha competencia en el mercado?
Si hablamos de simples purificadores de aire, pues, en este campo, existe una competencia muy grande, en general. Pero nosotros presentamos desinfectadores de aire y, en eso, a día de hoy, somos únicos en el mercado.
Tras poco más de un año de haber empezado, ¿qué se ha cumplido de todos vuestros planes? ¿Habéis conseguido los objetivos?
La verdad es que hemos conseguido bastante. Claro, todavía nos queda mucho, porque tenemos planes grandiosos. Pero Disair está en pleno crecimiento. Tenemos clientes fieles y satisfechos. Estamos representados por 25 distribuidores en todo el mundo. Aunque sí, queremos crecer más y estar presentes en cada lugar del planeta para, como decimos nosotros, “crear espacios saludables”.