La crisis ambiental genera cada vez más dificultades en las comunidades de todo el mundo. Es por este motivo que las personas buscan mejorar su forma de relacionarse con los alimentos, consumiendo lo justo y necesario con el fin de reducir la cantidad de residuos que se producen y a su vez anteponiendo en su rutina alimentos 100 % naturales en detrimento de los ultra procesados.
Las conservas vegetales son productos que ayudan a mantener un organismo saludable y que además protegen el medioambiente. En IBSA las elaboran de forma artesanal en un espacio que cumple con los más altos estándares de sostenibilidad.
Las ventajas de las conservas vegetales para la salud y el medioambiente
Las consecuencias del cambio climático y la contaminación ambiental exigen redoblar los esfuerzos por el presente y futuro del planeta. Una de las maneras más sencillas de hacerlo es reemplazar el consumo de alimentos que surgen de procedimientos industriales (generan mayores emisiones de CO₂) por los productos cuyo origen se centra en el cultivo y cuya elaboración se realiza sin aditivos ni conservantes.
El mecanismo de elaboración de las conservas vegetales surge de las zonas de cultivo de forma natural sin ningún tipo de agregado químico y permite que el alimento conserve todas sus propiedades; vitaminas, minerales, aminoácidos y nutrientes. Gracias a este proceso, los vegetales solo pasan unas pocas horas entre la cosecha y el envasado garantizando su seguridad alimentaria.
El sabor, aroma y textura de las conservas vegetales hacen que sea uno de los alimentos más elegidos para incorporar a los planes nutricionales. No solo son claves para la salud del organismo, sino también para el medioambiente; evitan el despilfarro de alimentos, su conservación no precisa de energía y reducen la cantidad de basura doméstica.
El compromiso ambiental de IBSA y sus alternativas de conservas vegetales
Desde sus inicios, la empresa lleva a cabo una filosofía de trabajo respetuosa con el medioambiente. Este compromiso ambiental se refleja en cada una de las etapas del proceso productivo y también en diversas estrategias que impulsan con el objetivo de mejorar las condiciones de los ecosistemas y la biodiversidad.
Entre sus acciones para el cuidado del planeta destacan; cumplir con los requerimientos de leyes, decretos o reglamentos en materia ambiental, proporcionar a los clientes información relevante sobre la calidad ambiental de sus productos, y asegurar que cada empleado comprenda la importancia de realizar actividades ecofriendly en su vida personal.
Las conservas vegetales se pueden añadir a cualquier preparación, ya sea como guarnición, en cremas de verduras, en ensaladas o como “topping” para pizzas caseras. En IBSA disponen de una amplia variedad, hay envasados con sofrito de tomate, cebolla caramelizada, pimientos asados, guisantes o maíz entre otros.
Teniendo en cuenta que la crisis ambiental pone en jaque al mundo entero, cualquier acción que permita reducir su impacto resulta fundamental. Las conservas vegetales de IBSA son la clave para una alimentación saludable y sostenible.