Tomar la decisión de finalizar un matrimonio nunca es una tarea sencilla. Sin embargo, existen casos en los que la pareja llega a este acuerdo de forma conjunta. Aun así, es necesario contar con el asesoramiento de un abogado idóneo que asegure el correcto desarrollo del trámite y logre obtener el divorcio en cuestión de poco tiempo.
Conformado por un equipo de profesionales altamente cualificados, D. David Gómez González (socio-fundador) y D.ª María Tena Fernández (socia), DABOGADOS es un bufete nacido en 2007 que cuenta con especialistas en servicios jurídicos en Derecho Familiar, Civil, Penal y Laboral. Dispuestos a proporcionar atención de calidad a sus clientes en momentos delicados, ofrece asesoramiento en divorcios de mutuo acuerdo con el fin de transitar rápidamente por esta experiencia poco agradable.
¿Qué son los divorcios de mutuo acuerdo?
Los divorcios de mutuo acuerdo son aquellos en los que ambos cónyuges se encuentran de acuerdo con la separación y muestran conformidad en la forma de disolver el matrimonio. A través de un convenio regulador, la expareja deja constancia de los principales puntos de la disolución de la unión conyugal.
Tal como explican los expertos de DABOGADOS, la principal ventaja que presentan los divorcios de mutuo acuerdo es su rápida resolución, ya que suelen finalizar en aproximadamente tres meses.
La demanda de divorcio de mutuo acuerdo, vigente en España desde el 2005, trae consigo la necesidad de conocer los pasos a seguir para realizar el trámite sin incurrir en errores que retrasen su ejecución. Uno de los principales puntos a tener en cuenta es que el matrimonio a disolver tenga, como mínimo, tres meses de antigüedad. Asimismo, es fundamental que, junto con la demanda, se adjunte el convenio regulador de divorcio en el que la expareja establece los principales puntos acordados en el proceso.
¿Cómo realizar divorcios de mutuo acuerdo?
Los especialistas de DABOGADOS explican que el convenio regulador de divorcio debe incluir la manifestación explícita de querer terminar con el matrimonio; la forma en que compartirán el tiempo con los hijos, en caso de que los haya; establecer quién se quedará con la casa y la liquidación del régimen económico matrimonial.
De igual forma, de ser necesario, se debe incorporar una pensión compensatoria o de alimentos para los hijos. Cabe aclarar que, para que este documento sea válido, es imprescindible la firma de ambos cónyuges en todas las páginas. Establecido el acuerdo, debe ser presentado ante el juzgado, que luego citará a las dos personas para que ratifiquen lo acordado. La asistencia en estos encuentros es fundamental, ya que, en caso de que alguno de los dos no se presente en la cita, el divorcio de mutuo acuerdo quedará desestimado y se dará inicio al trámite por otra vía.
De ratificar el acuerdo, el convenio regulador pasará al Ministerio Fiscal, donde se confirmará que lo acordado no causa daños ni perjuicios a los hijos. De ser favorable la resolución, poco después se recibirá la sentencia y se establecerá la disolución de la unión conyugal.
Es importante mencionar que, pasados los años, si alguna de las partes desea modificar el acuerdo, podrá hacerlo solo si su situación sufrió cambios sustanciales con respecto a las circunstancias originales que dieron lugar al convenio.