Desde el momento que uno despierta por la mañana y hasta que se duerme está experimentando algún tipo de emoción, ya sea alegría, miedo, ira, tristeza, etc.
Las emociones están presentes siempre de una u otra forma e influyen tanto en la forma en que enfrentan los acontecimientos del día a día, como en las decisiones que toman a cada momento. Las emociones son el motor esencial para llevar una vida plena y crecer como persona, siempre y cuando se sepa transitar por ellas de manera fluida y saludable.
La mayoría de los adultos actuales han aprendido sobre cómo autogestionarse emocionalmente a través de las experiencias de vida, con los aciertos y equivocaciones. Las emociones y cómo gestionarlas no se enseñaba ni en la escuela, ni en las instituciones de educación superior. Sin embargo, se ha visto que educar en las emociones ha adquirido un espacio en la educación formal de niños y adolescentes hoy en día.
Autogestionarse emocionalmente es como ser el capitán del propio barco en el océano de las emociones y sentimientos. Significa tener un buen manejo de las emociones, en lugar de que ellas controlen a la persona.
¿Alguien ha sentido alguna vez que las emociones le arrastren como una ola gigante, y que pasado un punto ya no tiene control sobre lo que hace y dice? Eso es lo que la autogestión emocional trata de evitar.
La relación con la inteligencia emocional
La autogestión emocional está muy conectada con la inteligencia emocional, que es como la brújula emocional. La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer, comprender, gestionar y utilizar eficazmente las emociones propias y de los demás. Se trata de una habilidad crucial en la vida cotidiana que nos permite tomar decisiones informadas, relacionarnos de manera efectiva con los demás y manejar situaciones emocionalmente desafiantes. La inteligencia emocional implica varias competencias emocionales, y la autogestión emocional es una de ellas.
La autogestión emocional es una parte fundamental de la inteligencia emocional y se refiere a la habilidad de manejar las propias emociones.
La autogestión emocional comienza con el reconocimiento de lo que uno siente en un momento dado. Esto implica no solo dar un nombre a las emociones, como enojo, tristeza o alegría, sino también comprender las causas subyacentes de esas emociones. También se refiere a la capacidad de regular las reacciones, esto es, no dejar que las emociones desagradables desborden, sino, en su lugar, manejarlas de manera constructiva.
La inteligencia emocional también se relaciona con la autogestión emocional en el sentido de que ayuda a mantener la motivación y la determinación a pesar de los obstáculos. Al entender las emociones y dirigirlas de manera positiva, se puede mantener un sentido de propósito y enfoque en los objetivos.
La autogestión emocional también juega un papel crucial en las relaciones con los demás. Cuando uno es capaz de manejar las propias emociones, puede comunicarse de manera efectiva, resolver conflictos de manera constructiva y brindar apoyo emocional a los demás. Esto es esencial en la construcción de relaciones saludables y satisfactorias.
La importancia de la resiliencia y el equilibrio
La autogestión emocional también es clave para construir la resiliencia, que es la capacidad de recuperarse de las adversidades, de modo de enfrentar una situación similar de mejor manera la próxima vez. Cuando se pueden manejar las emociones de manera efectiva, uno se vuelve más fuerte y capaz de superar obstáculos. Además, ayuda a mantener o recuperar el equilibrio en momentos de estrés, evitando que uno se desmorone y si lo hace, a levantarse más rápido.
Una vida más plena y satisfactoria
Entonces, la autogestión emocional es como una caja de herramientas para vivir una vida más plena y satisfactoria. Ayuda a tomar decisiones inteligentes, construir relaciones saludables, enfrentar desafíos con valentía y encontrar la felicidad en cada día.
Para ello, el Programa Estar Bien, desarrollado por Kitegroup, cuenta con un módulo de aprendizaje orientado específicamente a la Autogestión Emocional. Este módulo incluye videos explicativos, ejercicios de reflexión descargables, así como material de consulta y acompañamiento.
Si se está escaso de tiempo, este programa es una alternativa a los abordajes tradicionales del autoconocimiento. Se puede aprender qué es una emoción, la diferencia con los sentimientos y estados de ánimo, así como el impacto que pueden tener tanto a nivel mental como físico. Dan herramientas y ejercicios para que se aprenda a reconocer y manejar las emociones de mejor manera.
Se puede hacer una prueba gratuita en la web y aprender a ser el capitán de las emociones y navegar hacia una vida mejor.