El 2022 ha estado marcado por un aumento en las cifras de concursos de acreedores. Más de 3.600 empresas habían recurrido a esta herramienta judicial hasta el tercer trimestre del año, lo que supera los registros de 2021 y 2020.
Sin embargo, se espera que el crecimiento sea menor en el año 2023, debido a la última reforma Ley Concursal llevada a cabo en septiembre. Esto motiva a las personas a informarse sobre los nuevos cambios de regulación. Asesoras jurídicas como ILIA Consulting ofrecen información actualizada sobre las novedades.
¿Cuáles son los cambios más significativos de la reforma a la Ley Concursal?
En primer lugar, la reforma ha eliminado el antiguo acuerdo extrajudicial de pagos, lo que permite a las personas físicas solicitar directamente el concurso de acreedores para acceder a los beneficios de la Segunda Oportunidad. Sin embargo, se puede impedir el acceso a este derecho a las personas que mantengan deudas con la Agencia Tributaria o la Seguridad Social.
En segundo lugar, se han establecido procedimientos especiales para las microempresas. Se consideran como tal aquellas con menos de 10 trabajadores y cuyo volumen de negocio anual sea inferior a 700.000 euros. En dicho proceso, se puede optar por la liquidación o por la continuidad.
Finalmente, esta reforma mejora la figura del concurso exprés. Los acreedores ahora pueden exigir que se evalúe la situación del concurso ante un posible archivo. Sin embargo, deben asumir ciertas cargas en el proceso.
¿Cómo beneficiarse de la Ley Concursal tras la reforma?
Los interesados pueden acogerse al nuevo Plan de Reestructuración, el cual permite que los acreedores reformen la empresa con el fin de lograr un objetivo deseado, ya sea capitalizar deuda, reducir capital o alcanzar acuerdos de quita y espera.
La nueva ley también introduce la figura del Experto en Reestructuración, la cual interviene cuando el deudor o los acreedores que sumen más del 50 % del pasivo lo soliciten. Las microempresas también pueden reestructurarse, pero el trámite es diferente al de las empresas.
La reforma implica nuevos cambios y criterios de aplicación práctica que se irán fijando en el marco legal de manera segura en los meses por venir. Mientras tanto, seguirá siendo necesaria la ayuda de profesionales para conseguir una solución adaptada a cada situación de insolvencia. Esto es lo que garantiza el equipo de ILIA Consulting gracias a su experiencia y preparación.
Todas las disposiciones generales de la nueva reforma estarán en vigor a partir del 1 de enero de 2023. Los implicados en la Ley Concursal tienen hasta entonces para actualizarse en esta materia.