En Domfesa son expertos en la fabricación de válvulas rotativas. Se han especializado a lo largo de los años en el diseño y fabricación de diversas soluciones industriales. A través de su Departamento de Innovación, Desarrollo e Investigación, fabrican prototipos elaborados para atender las diversas necesidades de manufactura.
Las válvulas rotativas son elementos de gran importancia en todo tipo de industrias, ya que permiten controlar el transporte y el mezclado de materiales sólidos de forma controlada. Constituyen un mecanismo de seguridad esencial en una gran variedad de máquinas, dispositivos y centrales en las que se trabaja con materiales como polvos o granos.
Qué es una válvula rotativa
Una válvula rotativa es un mecanismo que se utiliza para controlar el flujo de materiales sólidos en diferentes industrias. Este tipo de válvulas están formadas por la boca de entrada, una parte central donde se encuentra el sistema rotativo y la boca de salida. Gracias a ello se puede impedir o permitir el flujo, así como controlar la cantidad de material que circulará a través de ella. Suelen emplearse para cargar, descargar y mezclar productos y materiales con morfología polvorienta o granulada. Algunos ejemplos serían: harina, azúcar, cemento, triturados, cal, arenas, arcillas, productos químicos, materiales plásticos, maderas o alimentos triturados.
Elementos de una válvula rotativa
Las válvulas rotatorias están formadas por un cuerpo central que suele ser de acero. Dentro del mismo se aloja un rotor que cuenta con aletas. Estas son las encargadas de transportar el producto de la parte superior a la inferior. El rotor está sujetado por un árbol y dos tapas a ambos lados que refuerzan el cuerpo y permiten el acceso fácil al rotor para efectuar las labores de mantenimiento. Además, cuenta con un eje central que permite el movimiento rotativo.
Funciones de una válvula rotativa
Las válvulas rotativas tienen tres funciones principales:
La función principal de una válvula rotativa es permitir la dosificación de los residuos de polvos o material granulado, los cuales se generan durante diversos procesos industriales, un rotor interno hace la función de dosificador, ya que dependiendo del espacio entre sus aletas permite que las cantidades de polvos o residuos sean las adecuadas a desplazar durante un periodo de tiempo determinado. Estas deben ser resistentes a la abrasión, altas temperaturas y alta presión.
Transporte: las válvulas rotativas se usan en el transporte de elementos sólidos como polvos, granulados, tripas o elementos abrasivos.
Dosificación: mediante el sistema dosificador de la válvula se controla el volumen de material que pasa a través de ella.
Bloqueo: gracias a su función de esclusa, la válvula permite bloquear la entrada de sólidos en áreas de alta presión y dejar pasar únicamente el aire o el gas. De este modo se pueden aislar los sistemas de alta presión de los sistemas de baja presión. También se utiliza para evitar entradas de aire falso y asegurar el cierre hermético en la descarga de polvos.
Importancia de las válvulas rotativas
Contar con la maquinaria industrial adecuada es fundamental para mejorar los índices de productividad de cualquier empresa, ya que acelera los procesos productivos, minimizando los costes y las necesidades de personal. Las nuevas tecnologías y metodologías de los procesos han permitido que las herramientas ocupen cada vez menos espacio físico y requieran menos trabajo de mantenimiento.
Las válvulas rotativas son especialmente importantes en todas aquellas aplicaciones en las que el flujo de material debe ser controlado de forma segura y confiable. Las válvulas rotativas también son de gran utilidad en procesos industriales en los que el caudal debe ser regulado de forma precisa.
Tipos de válvulas rotativas
Las válvulas rotativas pueden ser de varios tipos según su tamaño y el material con el que están confeccionadas.
Según los materiales con los que están fabricadas
Las válvulas rotativas pueden ser de distintos materiales, en función de las condiciones de trabajo, el uso que se les vaya a dar y el funcionamiento que vayan a tener. Los materiales más habituales son el acero inoxidable y el acero al carbono, ya que estos son muy recomendables en procesos industriales en los que se requiere un grado de higiene elevado, como en la fabricación de medicamentos, la elaboración de químicos o la producción de alimentos.
Según el tamaño requerido
Estas válvulas también pueden fabricarse en distintos tamaños según las necesidades y requerimientos del cliente.
¿Por qué confiar en las válvulas rotativas de Domfesa?
Sus diseños les han permitido posicionarse como un gran apoyo en sectores como el rendering de subproductos cárnicos, fábricas de piensos y el reciclaje. Igualmente, atienden a empresas de los sectores químicos, la minería, fábricas de harina, agricultura y procesamiento de papel, entre otros. Son uno de los principales fabricantes de válvulas rotativas en España.