La industria gastronómica y hotelera es una de las actividades laborales más importantes de cualquier sistema económico. Con miles de comensales y clientes al año, el desperdicio alimentario que se produce en estos establecimientos es también numeroso, lo cual representa un factor alarmante, tanto por el desperdicio de recursos que esto representa, como por su notorio desajuste ético.
Existen varias medidas que están surgiendo para contrarrestar esta problemática.
La plataforma EAT INN, que promociona las plazas gastronómicas libres en los restaurantes de los hoteles, aporta una serie de recomendaciones en torno a la nueva Ley de Desperdicio Alimentario para la industria hotelera.
El desperdicio alimentario en la nueva reglamentación
Con el objetivo de generar medidas que ayuden a reducir la huella de carbono de los establecimientos hoteleros, la nueva Ley de Desperdicio Alimentario responde a la problemática por la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa en este sector.
El desperdicio alimentario se presenta así como una posibilidad que las marcas hoteleras tienen para marcar una diferencia significativa respecto al compromiso con la sostenibilidad, uno de los parámetros establecidos como prioridad en la nueva agenda de objetivos que el turismo se ha propuesto para el próximo siglo.
En este sentido, la ley busca generar un sistema más eficiente para detectar y corregir los focos de desperdicio en los restaurantes de los hoteles.
Mediante un plan de prevención de perdidas, que ponga como prioridad el consumo humano, y una adecuada gestión de los residuos, se busca disminuir la cantidad de alimentos en estado de consumo que se desperdician a diario en este tipo de establecimientos.
El aporte de EAT INN
En consonancia con esta nueva ley y con el propósito de ayudar a corregir esta problemática, la plataforma ofrece soluciones pensadas para los restaurantes hoteleros, ayudándolos a completar sus plazas con comensales que no se encuentran alojados en dicho hotel.
De esta manera, se logra incrementar la ocupación de los establecimientos, reduciendo considerablemente los desperdicios y los alimentos que no llegan a destino de consumo.
Mediante un buscador al que acceden los clientes, que permite encontrar restaurantes por zona y fechas particulares, EAT INN publicita los espacios gastronómicos de manera gratuita, cobrando pequeñas comisiones solamente en los casos en que los comensales acudan a los lugares a través de la plataforma.
El servicio ofrece también una calculadora de costes, donde cada negocio puede determinar cuantos desperdicios genera y cuanto podría ganar en caso de incrementar las plazas ocupadas en sus restaurantes.
Los nuevos objetivos de la agenda medioambiental intentan construir espacios que no generen desperdicios, a la vez que ayudan a los establecimientos a mejorar la ecuación financiera con la cual tienen que sostenerse.