La tokenización es el registro de activos económicos del mundo real sobre una blockchain, la tecnología popularizada por el Bitcoin que pone a disposición un registro de cuentas y transacciones inmutable e imposible de hackear.
Dadas sus ventajas, la industria de la tokenización se ha convertido en una de las principales bazas de innovación y crecimiento del sector financiero, ofreciendo oportunidades sin precedentes tanto a inversores como a empresas, particularmente para el capital privado, el más abundante con alrededor de 200 billones (trillions en inglés) y las cifras muestran el fuerte aumento del interés.
La tecnología al servicio de la financiación de empresas
En 2021, el crowdfunding de capital recaudó 113.520 millones de dólares, frente a solo 8.610 millones en 2020, una tasa de crecimiento de más del 1.000 %, del que buena parte se debe a la nueva modalidad de crowdfunding tokenizado, conocida como security token offering (STO). Este mecanismo de captación de fondos aprovecha la tecnología blockchain para permitir a las empresas la emisión y venta de tokens digitales. Dependiendo de cómo prefieran financiarse, estos tokens representan acciones o un derecho de cobro de préstamo frente a la empresa.
Para las empresas no cotizadas, conseguir financiación se hace más accesible gracias a la tokenización, ya que, por primera vez, invertir en empresas no supone aparcar el dinero en un activo desprovisto de liquidez. Al digitalizarse, estos activos se negocian de manera más fácil y eficiente, creando nuevas oportunidades para que las empresas crezcan y se expandan.
Con una tasa de crecimiento de la inversión tan acusada, es evidente que los inversores tienen apetito por acceder a atractivas oportunidades, lo que está fomentando la profileración de STOs, facilitando así la inversión, incluyendo las transnacionales, y poniendo las bases de un crecimiento explosivo de la tokenización.
La acusada diferencia de rentabilidad entre el capital público y el privado
Pero los beneficios de esta tecnología no se limitan al crowdfunding y las STOs. Según un informe de la firma de inversión Cambridge Associates, el capital privado ha generado un retorno medio del 13,2 % durante la última década, en comparación con solo el 6,57 % de los mercados públicos.
Estos impresionantes rendimientos tampoco se limitan a unas pocas regiones selectas. Los fondos de capital riesgo españoles han registrado una tasa interna de rentabilidad (TIR) neta del 11,2 % entre 2006 y 2021, superando ampliamente al Ibex 35, que generó una rentabilidad de tan solo el 3,3 % durante el mismo periodo. En España el sector de la tokenización está liderado por Token City, empresa pionera cuyo equipo está detrás de la primera plataforma de crowdfunding en realizar STOs.
El contundente apoyo de la banca de inversión
Ante estas cifras, como era de esperar, la banca de inversión también está volcada en el uso de la tokenización, que permite procesos más rápidos a menor coste, aumentando aún más el potencial de obtener rendimientos significativamente más altos que con las inversiones tradicionales.
Según un estudio de Boston Consulting Group (BCG), se espera que la tokenización de activos líquidos alcance los 16 billones (trillions) de dólares en 2030, lo que equivale al 10 % del PIB mundial. Estimaciones de este calibre ponen de relieve la enorme oportunidad tanto para los inversores como para las empresas, y recalcan la creciente importancia de esta tecnología en el sector financiero.
No es de extrañar, por tanto, que se prevea un crecimiento explosivo de la tokenización durante los próximos años. En esa línea, un estudio de Citi Bank reveló que casi el 90 % de las instituciones financieras están utilizando o estudiando activamente casos de uso de activos tokenizados con blockchain o tecnología de registro distribuido (DLT). Un indicador más que apunta hacia el crecimiento sostenido de la industria.