La industria del diamante ha sobrevivido varias crisis desde que De Beers lanzó una campaña de marketing sin igual en la que convenció a todos de que nada es más valioso que un diamante natural.
La expansión de la joyería de moissanita a nivel global podría suponer el principio del fin para el diamante, una piedra preciosa cuyo valor reside en una exitosa estrategia de marketing sin precedentes y cuyo precio social y medioambiental no tiene justificación.
La moissanita pone en jaque al rey de las piedras preciosas y hasta el más escéptico se plantea muy seriamente si vale la pena desembolsar los miles de euros que suele costar una joya de diamante cuando ve una moissanita en persona.
En este artículo, se habla de la moissanita, la gema que brilla más que un diamante y cuyas características sin igual llevan 25 años poniendo en duda la supuesta supremacía del diamante. La cuestión: ¿es la moissanita la mejor alternativa al diamante o, simplemente, la moissanita es mejor que el diamante? Lo que está claro es que la moissanita ha llegado para quedarse.
También se hablará de FARO, empresa fundada por una ingeniera gallega, pionera en España, cuyas joyas de lujo made in Spain están consideradas las mejores joyas de moissanita de España y un referente de calidad en Europa. Sus anillos de compromiso espectaculares son el objeto de deseo de muchas novias y cada vez son más las que dan el “sí, quiero” con esta misteriosa piedra.
La moissanita es mejor que el diamante
La moissanita es una piedra que existe en la naturaleza, pero es extremadamente escasa y pequeña; por ello no se descubrió hasta el siglo XIX. El químico francés y premio nobel Henri Moissan fue su descubridor y de ahí el nombre de esta gema de descubrimiento y fama reciente.
No obstante, la moissanita que se utiliza en joyería es cultivada en laboratorio y tiene la misma composición y propiedades químicas y físicas que su contraparte natural. En apariencia, parece diamante, pero brilla más, confiriendo a las joyas de moissanita un aspecto lujoso típico de las joyas de diamante de calidad. Al igual que los diamantes, se puede presentar en versión incolora o en algunos colores como el amarillo, azul, gris o verde.
¿Brilla más? Sí. La belleza de un diamante se mide a través de tres propiedades ópticas: el índice de refracción, la dispersión o fuego y el lustre. La moissanita supera al diamante en todas, es decir, la moissanita es objetivamente más atractiva según la ciencia.
En cuanto a la durabilidad, moissanitas y diamantes empatan. Por un lado, con una dureza de 9.25 en la escala de Mohs la moissanita es la segunda gema más dura que existe, solo por detrás del diamante y por encima de zafiros y rubíes. Sin embargo, en gemología, la dureza es la resistencia a la rayadura y esto solo quiere decir que a una moissanita solo la podría rayar una punta de diamante o moissanita, lo cual no suele ser una situación ni mucho menos habitual.
Por otro lado, un aspecto muy importante en joyas de uso diario como anillos de compromiso es la tenacidad, que en gemología se define como la resistencia a impactos. En cuestión de tenacidad, una vez más, la moissanita gana al diamante, pues tiene valores excelentes de tenacidad mientras que la del diamante varía de buena a excelente según el plano.
También tiene una estructura cristalina extremadamente estable y permanece inalterable ante cambios de temperatura y exposición a sustancias químicas, por lo que su apariencia y brillo no cambian con el tiempo, como sí que ocurre con piedras preciosas más blandas (esmeraldas) o imitaciones de baja calidad del diamante como la circonita.
Precio de una moissanita
Si bien la joyería de moissanita sigue siendo un artículo de lujo, para un mismo diseño, las joyas de moissanita valen una fracción de lo que cuesta su equivalente en diamante. Las diferencias se agudizan según aumenta el tamaño de la piedra y son menores en tamaños pequeños.
Por ejemplo, el anillo solitario tradicional que suele llevar, al menos, un quilate de diamante, no baja de los 10.000 euros en las joyerías españolas más conocidas si el diamante es natural. Si el diamante es de laboratorio, para una calidad determinada, el precio del anillo puede reducirse drásticamente, aunque continuará siendo un precio muy elevado. Sin embargo, un solitario de las mismas características en moissanita se puede encontrar por menos de 1.000 euros, a menudo con mejor color, pureza y talla y, como se ha explicado anteriormente, más brillo. Una diferencia de entre 3.000 y 9.000 euros en un anillo de 1 quilate que se ve exactamente igual y de la misma durabilidad. Recordar que el quilate es una unidad de medida de peso que equivale a 0,2 gramos. ¿Vale la pena?
Desde FARO, cuentan que al principio todo el mundo es escéptico, pero que una vez prueban las moissanitas ya no compran diamantes. La razón es que si gustan los diamantes, encantarán las moissanitas, pues diferenciar entre moissanita y diamante es imposible a simple vista, y hace falta un experto con, al menos, una lupa de 10 aumentos para aclarar de qué especie se trata.
De hecho, muchas personas que compran joyería de moissanita ocultan a sus conocidos la verdadera naturaleza de su piedra y dirán que se trata de diamante. Y podrían, incluso, intentar demostrarlo con éxito, porque los probadores tradicionales de diamante también confunden la moissanita con el diamante.
Además del elevado precio para el consumidor, los diamantes naturales tienen un alto precio para la humanidad y el planeta. Este año, una vez más, la reputación de la industria del diamante ha sido puesta en duda durante el escándalo que se originó con los diamantes rusos y las sanciones en contra de la guerra de Ucrania. De nuevo, el Proceso de Kimberley mantiene una definición de diamante de sangre que esconde intereses económicos y protege exclusivamente a los gobiernos de los países productores, pero que en ningún caso garantiza el origen ético de los diamantes y ni mucho menos elimina el tremendo impacto ambiental de su extracción.
FARO, lujo made in Spain y moissanitas de confianza con todas las garantías
FARO es una empresa pionera en la promoción, diseño, fabricación y venta online de joyería fina de moissanita en el territorio español. La compañía ha apostado por el lujo made in Spain y ha decidido aliarse con los joyeros artesanos españoles para explotar la belleza y calidad de las moissanitas y así brindar una alternativa mucho más brillante, ética y responsable que las joyas de diamantes. Joyas realizadas en España que llegan con la promesa de democratizar la joyería premium en el país y a las que las previsiones de crecimiento auguran un futuro tan brillante como la moissanita.
Al ser fabricantes, FARO ofrece a sus clientes la posibilidad de personalizar las joyas de su catálogo o incluso crear una joya desde cero. La misión es crear la joya de los sueños, con un brillo como jamás habías visto.