Un 60 % de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial se genera desde las ciudades, que, además, consumen hasta un 78 % de la energía, según la ONU-Habitat. A causa de estos factores, las personas que viven en zonas urbanas son más vulnerables tanto al cambio climático como a enfermedades de distintas clases.
Actualmente, las grandes metrópolis solo ocupan el 2 % de la superficie de la Tierra. Por esta razón, muchas personas buscan la manera de vivir en el campo para tener mayor tranquilidad y salud. Empresas como Feelin Home ayudan a crear casas sustentables es sitios rurales.
Ventajas de salir de la ciudad y vivir en el campo
En los últimos años, se han creado campañas para estimular la vida en zonas rurales de diversos países de Europa. Sumado a esto, el teletrabajo, la expansión de grandes empresas y los incentivos económicos dados han aumentado la migración al campo. Además, en términos de ambiente, alejarse de la ciudad puede traer grandes beneficios.
Las metrópolis son lugares caracterizados por ruidos intensos y constantes. El sonido de las personas y de los coches genera contaminación acústica. Por su parte, la aglomeración de peatones y vehículos hace que sea difícil el desplazamiento, tanto en coche como al caminar. A su vez, esto genera contaminación y acumulación de basura en ciertas zonas, provocando enfermedades de diferentes tipos. Asimismo, los niveles de estrés suelen ser altos, ya que, en su mayoría, los ciudadanos viven presionados por el alto coste de la vida y los impuestos.
En contraste, la vida en el campo es más despejada, pacífica y tranquila. Además, existen zonas verdes que proporcionan una mejor calidad de aire y ambiente. Debido a esto, tiene una función desintoxicante que mejora y alarga los años de vida.
Optar por construir una segunda casa en el campo
Aunque la vida en el campo presenta muchos beneficios, abandonar las responsabilidades de la ciudad puede tener ciertas complicaciones. Por esto, hay quienes deciden combinar ambos sitios. Para hacerlo, mantienen su vivienda principal en la zona urbana y construyen una segunda casa en la zona rural, que funcione como lugar de escape.
Este plan puede parecer costoso, sin embargo, hay materiales y métodos alternativos eficientes, eco tecnológicos y sustentables que permiten construir viviendas a un menor precio del tradicional.
Los materiales usados en este tipo de casas suelen ser madera, steel frame, hormigón celular, entre otros. Su mayor ventaja es que son más versátiles que los ladrillos, además, son muy duraderos.
Para construir casas funcionales es necesario acudir a expertos. En la empresa Feelin Home ofrecen asesoramiento a sus clientes y los ponen en contacto con el fabricante ideal para el proyecto planteado. Conseguir todos los beneficios del campo es posible con segundas casas más económicas y amigables con el medioambiente.