En la actualidad, un amplio número de cultivos se ha visto severamente afectado por los continuos cambios climáticos, especialmente cuando se presentan granizos o heladas que causan grandes daños a cualquier tipo de plantación. Sin embargo, los avances tecnológicos han permitido el desarrollo de herramientas que ayudan a combatir esta situación y brindar una mayor protección a los cultivos.
Se ha oído hablar mucho últimamente de los “cañones antigranizo por ondas de choque” o “cañones sónicos”, cada vez más utilizados en el sector de la agricultura y que está generando mucho revuelo social y mediático, teniendo cada vez más críticos y más defensores.
Han querido poner luz en este tema y saber cuál es la verdad del funcionamiento de estos sistemas y si verdaderamente son efectivos como medida real para proteger contra el daño del granizo en la agricultura.
Ramón, presidente de una de las principales cooperativas que hay en España y que desde hace tres años lleva utilizando este sistema como medida de protección contra el granizo en su finca, explica que “realmente funciona, parece magia, pero funciona”.
Ramón cuenta que adquirió esta solución como medida de protección debido al alto coste que tiene el seguro agrario. “Este Sistema es mucho más económico que el seguro agrario y lo más importante, con este sistema si puedo recoger mi fruta, con el seguro agrario solo obtengo una compensación por las pérdidas sufridas. Mi negocio está en poder comercializar mi fruta”. Ramón nos aconseja que perdamos el miedo en esta solución y que hay que innovar para crecer en la agricultura.
La siguiente persona que ha sido entrevistada es Adolfo, agricultor de toda la vida en la provincia de Huesca que con esfuerzo y pasión saca adelante su trabajo. “Nosotros adquirimos este sistema apostando en la confianza que nos dieron propietarios que ya lo utilizaban y no nos hemos equivocado”, afirma.
Adolfo lleva cinco años utilizando este sistema y confiesa que está contento y que “gracias a utilizar este tipo de sistema para protegernos del granizo hemos podido comercializar nuestra fruta”.
Respecto a la polémica que suscita este tipo de sistemas que eliminan la lluvia, Adolfo responde: “Totalmente falso, aquí nos llueve exactamente igual que antes, somos agricultores y necesitamos del agua para vivir. Si este sistema evitase la lluvia, yo sería el primero que no lo utilizaría, totalmente falso”.
Respecto a la polémica sobre si este tipo de sistemas afecta o no al ciclo hidrológico de la nube, se hace petición a AEMET, la agencia española de meteorología. Esta aporta un informe que indica que este tipo de sistemas no afecta a las variables meteorológicas ni al agua precipitada por las lluvias.
Por otro lado, también ha decidido aportar información una de las empresas que se dedican a la fabricación y distribución de este tipo de sistemas para que puedan dar su opinión sobre el revuelo generado por el uso de estos cañones y qué hay de verdad en todo lo que se publica. “Estamos completamente sorprendidos, nos asombra la gran desinformación que existe acerca de estos sistemas”, comenta Sonia Bellido, responsable de comunicación de la compañía Grupo SPAG, con sede en Valencia. “Los sistemas antigranizo por ondas de choque no afectan al ciclo hidrológico, es decir no afectan a la lluvia”, también matiza: “La gente los confunde con los antiguos sistemas que utilizaban yoduro de plata, que actualmente están prohibidos y son peligrosos. Nuestro sistema no emite ningún tipo de producto químico ni contaminante, solo hace uso de la física y la tecnología para eliminar el daño que causa el granizo en la agricultura”. En cuanto al fuerte crecimiento que está teniendo este tipo de sistemas responde: “Es normal, es el sistema más económico para minimizar el daño que supone el granizo en los cultivos. Y es que, por menos de 65 € al año por hectárea, un agricultor puede protegerse del efecto que produce el granizo”.
La empresa también quiso hablar de la legalidad de estos sistemas. “Como no puede ser de otra forma, nuestros Sistemas cumplen con toda la legislación vigente, no solo en España, sino en los 28 países en los que estamos presentes” y matiza: “Nuestro sistema de protección contra el granizo es el elegido en sectores tan competitivos como la aeronáutica o la automoción”.
Este es un método real para la protección contra el granizo, de bajo coste y que no tiene ninguna influencia en la lluvia, el tiempo dirá si es el método definitivo y si se estandariza dentro del sector de la agricultura.