La caída de cabello se da por múltiples factores. La alopecia puede ser hereditaria, cuando existen antecedentes familiares cercanos, o generarse por situaciones de estrés en el trabajo o la vida personal.
Igualmente, puede presentarse por efectos secundarios de tratamientos médicos o durante el embarazo, en el caso de las mujeres.
Datos del Ministerio de Salud de España revelan que el 42,6 % de las personas en este país sufren de alopecia o algún tipo de pérdida de cabello. Es el segundo país de Europa con mayor índice en este tipo de patologías, solo por debajo de la República Checa.
Las fibras capilares 100 % naturales
Con ese porcentaje de personas con pérdida de cabello, es habitual que en el mercado se ofrezcan muchas ofertas con soluciones para solventar este problema. Sin embargo, muy pocas son efectivas, confiables y mucho menos naturales. Por ello, la alternativa de las fibras capilares ha tomado mucho auge en los últimos años.
Las fibras capilares son unos filamentos milimétricos que se adhieren al cabello por carga electrostática y reflejan inmediatamente la imagen de una cabellera abundante. Se comenzaron a usar como una solución capilar instantánea en los Estados Unidos, hace más de 30 años, entre actores y actrices de Hollywood.
En Europa, una empresa que ha destacado en esta metodología para disimular calvicie es Kmax, originaria de Italia. Ellos han desarrollado productos que logran ese cometido, son 100 % naturales, sin conservantes, colorantes artificiales ni otros agentes químicos. Gracias a ello, no causan efectos secundarios o negativos sobre el cuero cabelludo. Además, son las únicas en su categoría que han sido testadas dermatológicamente.
El secreto de las fibras capilares naturales de Kmax
La empresa Kmax comercializa sus productos en España, así como en otras partes del mundo. Sostiene que se han convertido en una excelente opción para disimular la calvicie y mostrar una mayor densidad de cabello. La razón es que sus productos son de los únicos que están hechos de keratina, son 100 % naturales y resistentes al viento, lluvia o sudoración.
Otras marcas venden fibras capilares hechas a base de rayón, un elemento sintético elaborado a partir de la celulosa que ofrece una adhesión débil. También se comercializan fibras hechas con lana de oveja que igualmente tiene problemas de adhesión. Una alternativa más eficaz son las fibras de origen vegetal, como las de algodón, aunque con el paso de los minutos pueden llegar a transformarse en grumos, lo que hace que este tipo de fibras sean detectables a la vista. Para más información, se puede consultar su página web y comparar su amplio catálogo de productos.