Sandra y Nadine Botas fueron elegidas campeona y subcampeona en el Campeonato de España de Esquí Náutico celebrado en el centro leridano 2Llacs durante el último fin de semana de setiembre. Las dos hermanas de Seseña representarán a España en el Campeonato del Mundo que tendrá lugar en Estados Unidos.
Sandra y Nadine son deportistas que practican el esquí náutico en Botaski, un complejo dirigido por Ricardo Botas y Cristina Medem, ubicado en Castilla la Mancha, en el municipio de Seseña, a media hora tanto de la ciudad de Toledo como del sur de Madrid.
Un complejo diseñado específicamente para el esquí náutico
El lugar de trabajo y entrenamiento de las vigentes campeonas españolas fue diseñado especialmente para el esquí náutico. Botaski Seseña Waterski Complex cuenta con dos lagos artificiales especialmente construidos para estar apartados del viento y con orillas creadas para absorber el impacto de las olas. Actualmente, el complejo es una referencia internacional para los amantes de este deporte y está abierto para todos aquellos que se quieran acercar al mundo del esquí náutico a solo 30 minutos de Madrid.
Para que los esquiadores puedan obtener su mejor performance, en Botaski se utilizan las embarcaciones diseñadas por la empresa Nautique, con 90 años de trayectoria en el mundo del esquí náutico. De hecho, la Ski Nautique 2019 es considerada por los expertos como la mejor embarcación de la actualidad. Tanto Ricardo Botas como su mujer Cristina y sus hijas Sandra y Nadine buscan que todos los que practiquen el esquí lo hagan en las mejores condiciones posibles.
El arte del equilibrio y un deporte completo
El esquí náutico es un deporte tanto de competición como de entrenamiento que llegó a ser de exhibición en los Juegos Olímpicos de Múnich de 1972. Como al practicarlo se requiere el uso tanto de las piernas como de los brazos se considera que es uno de los deportes más completos. Para practicarlo se requiere fuerza física, técnica y reflejos, pero sobre todo equilibrio.
Hay distintas disciplinas, eslalon, figuras y saltos. En cualquier caso, el esquiador toma un cable o una cuerda y es arrastrado por una embarcación. A nivel profesional, los deportistas pueden llegar a velocidades que superan los 140 kilómetros por hora.
Para cualquiera de las variantes disponibles siempre es mejor contar con el apoyo de especialistas como los fundadores de Botaski, una buena opción para disfrutar del esquí náutico en Madrid.