El mercado de los colchones está acostumbrado a presentar siempre el colchón más cómodo, más duro, más blando, pero habitualmente enfocado en el precio más bajo y el mayor descuento.
Pero al igual que en otros sectores, hay empresas punteras que han puesto el foco en los problemas que su producto sería capaz de resolver más que en el precio mismo, en este sector del descanso también existe un referente.
La marca CORE Colchón es una de las líneas de negocio de una empresa con 70 años de experiencia en el sector y que nació con una estrategia diferente al resto del mercado: focalizar todo su esfuerzo en encontrar el grado de confort que los usuarios demandaban y no en el precio del producto.
Varios meses de trabajo dieron como resultado COREADAPT®, una tecnología llevada al mundo del descanso que tenía en cuenta las diferencias anatómicas de mujeres y hombres en la fabricación de sus colchones viscoelásticos.
Los resultados de esta estrategia se vislumbran claramente en los resultados económicos de la empresa, que ha visto crecer sustancialmente su presencia en el mercado así como sus números económicos de los últimos ejercicios.
En un sector tan importante como el descanso, la empresa CORE Colchón entendió la relevancia de desarrollar un producto diferenciado, que no se asemeje a los existentes colchones catalogados como los más baratos o los más cómodos.
La innovación de esta tecnología radica en brindar a su usuario la posibilidad de modificar su firmeza las veces que sea necesario, a través de un refuerzo intercambiable que se ubica en la zona lumbar. De esta manera, cualquier persona puede obtener una alineación perfecta de su columna a la hora de dormir, incluso en distintas zonas de la cama de forma independiente, lo cual permite adaptarse a las particularidades anatómicas tanto de quienes duermen de forma individual, como de quienes duermen en pareja.