La inversión extranjera en inmuebles comenzó el 2021 siguiendo con la tendencia descendente que registró en el 2020, impactada principalmente por la pandemia, el cierre de fronteras y las restricciones para viajar. Así lo demuestran los datos del Colegio de Registradores de la propiedad, Bienes Muebles y mercantiles de España, según los cuales, el porcentaje de compra de vivienda por extranjeros alcanzó en el primer trimestre del 2021 el 9,7%, 1 punto porcentual menos que en el trimestre precedente y 2,3 pp menos en variación interanual.
No obstante, el segundo trimestre registró los primeros indicios de recuperación. De hecho, en el período comprendido entre abril a junio del 2021, el porcentaje de compra de vivienda por parte de los extranjeros se situó en el 9,95%, con un ascenso trimestral de 0,23 pp y un descenso interanual de 0,71 pp, mucho menor que la diferencia registrada en el primer trimestre, según la Estadística Registral Inmobiliaria del 2º trimestre del 2021 de los Registradores de España.
Si bien los últimos datos disponibles siguen situando el peso de compra de los extranjeros por debajo del 10% del total y de las cifras habituales de los últimos años, el avance de la campaña de vacunación a nivel global y la relajación de las medidas de movilidad internacional, como, por ejemplo, la reciente apertura de fronteras de EEUU para viajeros europeos vacunados, se plantean como factores de impulso para la reactivación de este mercado. Así, los expertos de Instituto de Valoraciones han analizado cómo se está comportando la inversión extranjera en vivienda y qué esperar a corto plazo.
A pesar de la caída de los británicos, aumenta la inversión por parte de otros europeos y marroquíes gracias al impulso de la movilidad internacional y la reactivación del mercado inmobiliario.
Desde hace muchos años, los británicos han sido la nacionalidad extranjera que más viviendas compra en España. De hecho, en el segundo trimestre del 2015 ocupaban el 20% de las compras de viviendas hechas por extranjeros, según los datos del Colegio de Registradores de la propiedad, Bienes Muebles y mercantiles de España. Ahora, si bien es cierto que los compradores de esta nacionalidad siguen estando a la cabeza, su peso en el total de compras de vivienda por parte de extranjeros en España ha ido descendiendo en los últimos años hasta llegar al 9,49% en el segundo trimestre del 2021, una cifra que marca un nuevo mínimo histórico en términos porcentuales, con casi 3 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del 2020.
Entre las razones que explican este cambio de comportamiento se incluyen la incertidumbre por el Brexit, además de las restricciones para viajar entre Reino Unido y España que han estado vigentes desde la llegada de la pandemia. No obstante, este descenso puede deberse a una situación puntual que luego podría recuperarse impulsado por el interés de los británicos por tener viviendas en zonas de costa que gozan de buenas condiciones climáticas y en los que los precios de la vivienda son más asequibles que en otras ciudades europeas.
Ante esta caída del peso de los británicos en las operaciones realizadas por extranjeros, otras nacionalidades han aumentado su actividad en el país. Ejemplo de ello serían los marroquíes, alemanes y franceses que en el segundo trimestre del año aumentaron su peso dentro del total de compras de vivienda realizadas por extranjeros respecto al mismo periodo del año anterior en 1,9, 1,8 y 0,3 puntos porcentuales respectivamente, según los datos de los Registradores de España.
Las zonas turísticas costeras seguirán atrayendo gran parte de la inversión e interés de los extranjeros, y el teletrabajo podría incluso potenciar estas áreas y zonas rurales.
Las áreas de costa son las preferidas por los extranjeros. Y se espera que, tras la época de confinamiento y las dificultades para viajar que han protagonizado el último año, esta tendencia continúe e incluso se potencie en los próximos meses por el deseo que tienen los extranjeros de viajar a destinos que les ofrezcan buenas condiciones climatológicas, playa y relax. De hecho, tanto en el primer como en el segundo trimestre del 2021, los extranjeros realizaron más del 20% del total de compras de vivienda efectuadas en las Islas Baleares o Canarias, y entre el 10 y 20% en la Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía y Cataluña, según los Registradores de España.
Y es que los atractivos precios que ofrece el sector inmobiliario nacional, comparado con otros países, para los extranjeros, así como el interés de estos públicos por adquirir viviendas en zonas de costa o en áreas rurales, están influyendo también en el impulso de la inversión. Sobre todo, teniendo en cuenta que, en el segundo semestre del 2020, el precio medio por metro cuadrado de las compras realizadas por extranjeros fue de 1.764€/m2, un 2,1% menos que en el mismo período del 2019, antes de la pandemia, y el primer descenso en los precios desde 2013, según los datos ofrecidos por el Consejo General del Notariado. Asimismo, existe un interés de los compradores por tener viviendas que cumplan con la nueva demanda de espacios más amplios, luminosidad y espacios exteriores, y para ello, las zonas costeras y rurales son ideales.
En este sentido, un público que está demostrando especial interés en estas zonas son aquellos con alta capacidad adquisitiva que buscan viviendas de lujo que les ofrezcan todas las comodidades para tener un estilo de vida alto tras los confinamientos vividos, aprovechando las ventajas de la digitalización y el teletrabajo, que parece haber venido para quedarse, aunque sea en formato híbrido. Y que, además, llama la atención de los no europeos por la posibilidad que ofrece de poder optar a un Visado de Residencia por Adquisición de Bienes Inmuebles en España (Golden Visa), con una inversión de mínimo 500.000 euros.