En los últimos años, el género de ficción y erotismo se ha convertido en uno de los más buscados en las librerías, siendo la mezcla de misterio y pasión una combinación muy atractiva para los lectores que buscan algo diferente. En muchos casos, los autores combinan estas ideas creando historias auténticas que inundan la imaginación y los sentidos de los lectores, como es el caso de «Meritxell, la mujer fatal que lo cambió todo».
El autor Abelardo de Santiago Vázquez, creador del libro Meritxell, comenzó desde la juventud su interés por la lectura con novelas de aventura y misterio. Gracias a su pasión, se ha arriesgado a crear una novela de misterio con un subgénero erótico, donde relata la travesía de tres parejas que se conocen en un crucero y terminan en un enredo amoroso con asesinato y desenlace inesperado.
Una historia de romance y asesinato
De acuerdo a la historia, las tres parejas se conocen en un crucero y comienzan una amistad después de su primer encuentro, donde el protagonista queda extasiado y embriagado por la belleza y simpatía de Meritxell. Más adelante, todos se vuelven a encontrar en Barcelona, donde tras compartir una cena muy lujosa en el chalé de Josep y Meritxell, se dirigen a Castellfollit de la Roca. Después de muchos intercambios verbales e insinuaciones entre Alex y Meritxell, surge el primer encuentro.
En la novela, Alex vive nuevas experiencias que le dan felicidad a través de la aventura y el erotismo junto a Meritxell y que son inexistentes en su matrimonio, lo que lo lleva a adentrarse en esa relación, sin importar el riesgo, ya que Meritxell esconde un secreto inimaginable.
Grato recibimiento por parte de los lectores
En su gran mayoría, el misterio y la tensión sexual entre los protagonistas atrapa de forma inmediata al lector. Además, la intriga por el asesinato, las investigaciones y el hecho de sospechar de todos los que están dentro de la trama, deja una sensación adictiva que tanto se busca al leer novelas de este estilo, lo que se convierte en una grata experiencia para el lector.