Estudios afirman que las sesiones de coaching, como complemento de los procesos de formación en las compañías, aumentan un 86 % la productividad de sus empleados. Esta técnica proveniente de Estados Unidos busca que la persona pueda alcanzar eficientemente los objetivos que se plantee.
En el caso de quienes se desenvuelven en el ámbito creativo o artístico, Psicóloga-Coach ofrece un acompañamiento que permite a la persona impulsar su potencial. Así, por sí misma, encuentra la solución a los retos y miedos que se presente la persona y que le supongan un bloqueo para el desarrollo de su capacidad.
La personalidad y el coaching van de la mano
Una persona no puede alcanzar el éxito ni el logro de sus objetivos si no se conoce en profundidad. Por ello, el autoconocimiento es fundamental para alcanzar el desarrollo personal y profesional. Además, es un pilar para la regulación de las emociones, las relaciones interpersonales y la evolución de sus capacidades.
Los estudios de personalidad analizan un conglomerado de características psíquicas de la persona para saber cómo respondería a determinadas situaciones. De modo que, conociendo en profundidad las diferentes tendencias personales, cada ser humano puede trazar un plan de acción más realista.
A través de este tipo de estudios, Psicóloga-Coach Eva Gómez Coloma ofrece información acertada con el objetivo de ayudar a sus usuarios a planificar su vida personal y profesional para así poder llegar a la meta que desean. Todo esto de la mano del coaching, un acompañamiento necesario para orientar los esfuerzos hacia el éxito.
El design thinking y el visual thinking permiten diseñar vidas
Psicóloga-Coach centra su empeño en ofrecer soluciones reales y apropiadas para cada cliente. Por esta razón, el design thinking es una parte primordial de su proceso, porque es capaz de generar soluciones innovadoras en poco tiempo.
Por su parte, el visual thinking es una herramienta capaz de organizar ideas o contenidos representados a través de dibujos y textos simples. A su vez, capacita a las personas para ser más precisas, potencia la creatividad y enriquece su aprendizaje.
Y, en conjunto, estas dos herramientas fungen como instrumentos para ayudar al usuario a diseñar la vida que quiere, tanto en lo personal como en lo profesional. De modo que, el visual thinking es una manera de agilizar y respaldar el proceso que se desarrolla con el design thinking.
Estos recursos no solo ayudan a las personas que se desenvuelven en el área creativa, sino que también son métodos eficientes para trazar un plan de vida y así asistir a cualquier persona en el alcance de sus metas y en la construcción de su nueva vida.