La cultura empresarial consiste en la internalización de valores por parte de todos los miembros de una compañía. Estos incluyen pensamientos, normas, metas, acciones, creencias y la filosofía de marca que quiere proyectar una determinada empresa ante sus clientes y la comunidad. Para fomentarla es necesario establecer estrategias que no siempre son accesibles. QMT es una empresa que ofrece el servicio de un interim manager para implantar un plan efectivo y fijar unos objetivos.
Ventajas de fomentar la cultura empresarial
El equipo de expertos de QMT señala la importancia de definir los elementos que integraran la creación de una cultura empresarial. Estos comprenden la visión, la misión y los valores de la marca. Es importante que sean viables y fáciles de internalizar en el colectivo de la organización.
También es esencial alinear esa cultura con un modelo organizativo que persiga el crecimiento y la rentabilidad del negocio, objetivos intrínsecos a toda organización empresarial.
Del mismo modo, la estrategia para fomentarla debe tener en cuenta factores como el perfil de las personas, la narrativa y el entorno. También debe ser coherente con el mensaje predicado. Si se consideran estos aspectos, es posible fijar una estrategia sólida con grandes posibilidades de éxito.
El fomento de la cultura empresarial permite una mejor cohesión del equipo. También refuerza el sentido de pertenencia, ya que sus miembros se identifican con la empresa y les enseña a diferenciarse de la competencia. Todo ello estimula la motivación hacia el trabajo y permite un mejor clima laboral. A su vez, este influye de manera positiva en la productividad de la compañía.
Una forma de trabajo para garantizar el éxito de gestión
QMT está especializada en el diseño y desarrollo de estrategias de interim management personalizados para las empresas. Estudia cada caso de manera individual y en función de sus necesidades crea el plan de trabajo con el que actuará el interim manager. Todo el trabajo que lleva a cabo este profesional lo hace integrado en el equipo ejecutivo de la empresa cliente. De esta manera, lo acompaña en la ejecución de las estrategias y monitoriza junto a ellos la evolución de las mismas. QMT ha ayudado, en este sentido, a más de 180 empresas de todo tipo de sectores, de alcance local y multinacional en 20 años de trayectoria.
La metodología que utiliza la empresa se basa en tres fases. La primera está relacionada con el diagnóstico inicial y responde a los interrogantes de en qué punto se encuentra la compañía y hacia dónde se dirige. La segunda contesta la pregunta de qué se necesita para llegar. Por último, la tercera fase confirma cómo se hará y es el trabajo que debe desarrollar el interim manager de QMT.