La cultura sostenible es un modelo innovador de negocio que se ha instalado y tiene como insumo la biodiversidad nativa, lo cual da lugar a la rentabilidad económica, la conservación de la biodiversidad y la consideración de los aspectos sociales.
Las empresas son conscientes de esto, por eso muchas han tomado cartas en el asunto y una de ellas es DoGood. Esta involucra a sus empleados, midiendo su impacto ESG y desarrollan un software que impulsa esta cultura a nivel mundial, en conjunto con otras compañías como lo son Siemens-Gamesa, BBVA y Fluidra, entre otras.
¿Qué son y cuál es la importancia de las guías para trabajar los criterios ESG?
A raíz de la reciente crisis sanitaria, se ha experimentado un radical cambio de las prioridades globales, lo que ha generado consecuencias como la re-localización de recursos, tiempo y esfuerzo. Esto ha traído nuevos desafíos económicos, sociales y ambientales que buscan resolverse bajo los criterios ESG, propiciando un lenguaje y vocabulario común alrededor de las preocupaciones mencionadas e impulsando la transparencia a la hora de tomar decisiones.
La guía de tendencias ESG busca demostrar los riesgos globales en materia social y ambiental, algo que ha impactado directamente en lo que hoy se entiende como prioridad. Existe una serie de tendencias que tienen el potencial de ser factores clave para mejorar la toma de decisiones corporativas. La naturaleza cooperativa de estos criterios es la base del aprendizaje que quiere ofrecer esta empresa.
Uno de los principales motores de DoGood: la importancia de marcar objetivos sostenibles en las empresas
Ignacio Barriendos, fundador y CEO de la empresa, marca como objetivo de DoGood instalarse como referentes en la autorrealización de la sociedad, con el valor humano como principal motor en la sociedad a través de pequeñas acciones. Mediante la ética, el esfuerzo y el trabajo en equipo, buscan que las empresas se movilicen y le den lugar a los empleados para que impulsen el valor empresarial a través de la cultura sostenible. Se generan métricas de sostenibilidad, gracias al impacto positivo de los empleados.
Asimismo, ofrecen guías ODS en las que buscan impulsar una educación de calidad, con una solución innovadora y así ayudar a las organizaciones a cumplir los objetivos de desarrollo sostenible. También, mantienen un fuerte compromiso para ayudar a personas con discapacidad en el deporte, como la iniciativa “Baloncesto sin rasgos”, a la que se le dona un 5 % de sus beneficios, buscando reducir las desigualdades y forjar alianzas con otras organizaciones para un mejor tejido empresarial.